La abogada Valeria Fiore, integrante de la Asociación Misionera de Mediación, pasó por los estudios de Un Domingo Cualquiera donde dialogó sobre los conflictos que se pueden desembocar en la relación con nuestros vecinos.
En ese marco Fiore indicó que el conflicto es algo inherente a las relaciones humanas y que podemos vivirlos desde diferentes espacios. Además agregó que una persona “asocia el conflicto con la forma en que nos acostumbramos a resolverlos, que la mayoría de las veces suele ser violenta, ya que hay un límite muy fino entre el acuerdo y el conflicto”.
Dentro de lo que tiene que ver con la mediación dijo que el desafío que se le presenta es el de como poder resolver un conflicto sin romper el vínculo entre las partes.
Fiore indicó que “lo mejor es construir una comunidad e ir fortaleciéndola para poder evitar o lograr el mínimo de conflictos”.
Con el trabajo que realiza la mediación se proponen métodos, en base al diálogo, en el cual las partes, junto al mediador, resuelven los conflictos de forma colaborativa y pacífica.
“La Dirección General de Resolución de Conflictos viene trabajando en todos los barrio de Posadas. Cada delegación municipal cuenta con un centro de mediación”, indicó la abogada.
Además contó que los centros de mediación comenzaron a trabajar, en los barrios de la ciudad, en marzo del año pasado, “construyendo de cero la experiencia en Posadas”.
Acotó que hasta marzo de este año ya se atendieron a más de 2000 personas e intervinieron en 200 mediaciones, de esos casos en el 70 por ciento hubo un acuerdo y en más del 80 por ciento se cumplieron.
“Estos números nos dan la pauta de que el servicio sirve porque vos, con tu trabajo, causaste un impacto, pacificaste un situación que podía terminar en forma violenta”, observó la defensora.
La Dirección, que se encarga de mediar en los conflictos vecinales, cuenta con tres dispositivos que se le ofrecen al vecino:
-La mediación
-Atención legal, para los casos que no pueden ser mediados
-Y la intervención de psicólogos, para casos especiales que tengan que ver con la violencia, las adicciones, etc.
Fiore destacó que “lo lindo de intervenir en las mediaciones es que se dan dentro de un proceso colaborativo en el cual la persona involucrada toma las herramientas del proceso y las aplica con otras personas y genera un efecto multiplicador y pacificador que se dan mediante estos métodos que aplicamos en cada intervención”.
Sobre el proceso de resolución de conflictos, la mediadora remarcó que debe empezar desde la voluntad, de las dos partes, de querer llegar a una solución. “Nosotros no podemos sentarnos a dialogar con alguien que no quiera, no lo puedo traer por la fuerza, esa sería la desventaja más grande pero a su vez tiene la ventaja de que, luego de lograr el dialogo, los acuerdos se sostienen en el tiempo. Está comprobado que lo que no se impone se respeta mucho más que lo que es impuesto por un tercero”.
La abogada contó que luego de lograr la mediación durante un conflicto y llegar a un acuerdo, el trabajo de la Dirección de Resolución de Conflictos continúa, ya que se realiza un seguimiento de dicha resolución “para ver cómo van las partes y como se cumple lo acordado”. “Más de un 80 por ciento de los acuerdos se cumplen, porque fue un acuerdo voluntario no impuesto”, indicó Fiore.
Dentro del proceso de mediación contó que la tendencia es “echarle la culpa al otro o pretender que los demás cambien de opinión”. “Estos procesos brindan la oportunidad de que las personas que participan se hagan cargo de su parte. Todos hablan de derechos y pocos hablan de las obligaciones que tenemos que cumplir como parte de la sociedad”, precisó.
En ese marco consideró que lograr que las partes reconozcan que tienen obligaciones que cumplir “es lo que más cuesta ya que los involucrados vienen con posiciones muy firmes y convencidos de que el otro es el que tiene que cambiar porque es el de la culpa”.
“El trabajo del mediador es mediar, es primordial la neutralidad delante de un conflicto. Nuestro interés como mediadores tiene que estar puesto en servir a estas personas y que encuentren un modo adecuado de convivir”, resaltó Fiore.
Valeria Fiore señaló que para pedir una mediación no hace falta realizar una denuncia a una dependencia policial “normalmente una denuncia hace que el conflicto se agrave. Es primordial asistir al centro de mediación antes de que el problema sea mayor”.
Entre los conflictos que más se atienden figuran:
-Los ruidos molestos
-Arboles crecidos
-La basura
-Los desagües
-La medianera
“En el tratamiento de las mediaciones partimos de la base de que un conflicto implica una oportunidad, no lo vemos como una cuestión que implica una sanción, porque a veces el castigo que se impone no involucra la modificación de la conducta cuestionada. Por eso, para poder cambiar a la sociedad, trabajamos desde la toma de conciencia”, remarcó Fiore.
Sobre la mediación en el ámbito escolar Valeria indicó que “como en todos los ámbitos, la gente tiende a negar que haya algún tipo de conflicto”.
En el sentido educativo destacó que “tener un buen clima áulico, un buena relación entre docentes, padres, directivo y alumnos es clave para gestionar un ambiente que genere ganancias y aprendizajes para todos”.
Según la letrada, “los niños que adquieran de chicos las herramientas de mediación van tener una ventaja en todo lo que es inteligencia social y los ayudará a ser más felices y a tener un mejor desarrollo en la vida”.
“Como mediadores, dentro del ámbito escolar, nosotros trabajamos primero con los adultos y después trasladamos la enseñanza al menor, ya que los niños adquieren estas capacidades con una facilidad impresionante”.
Después del trabajo con los adultos se pone en práctica el Programa de Mediación entre Pares con el cual se forman mediadores entre los estudiantes para que ellos mismos intervengan en sus conflictos. En ese marco, Fiore contó lo sorprendida que se siente cuando vive ese tipo de situaciones ya que los chicos sacan a relucir toda su creatividad durante la mediación de conflictos, “son sumamente creativos en las soluciones, se entienden entre ellos o transmiten con total claridad el problema”.
“En este ámbito trabajamos con niños de todas las edades, donde intervenimos con herramientas simples como los cuentos, talleres vivenciales, técnicas de respiración o círculos de diálogo”, apuntó.
“Muchos jóvenes sienten que no los escuchan y cuando le planteas estos espacios de diálogo se sienten contentos y contenidos. Quedan contentos por ser escuchados” agregó.
Fiore indicó que este tipo de trabajos escolares no suplante a la disciplina escolar, “son dos cosas que pueden coexistir juntas”, señaló. “Los regímenes de disciplina se aplican pero se trabaja para poder educar desde el conflicto”, destacó.
Para el joven es mucho mejor manejar el conflicto con sus pares que con un adulto “ya que produce un efecto diferente al que puede provocarle la sanción de un mayor”, indicó.
Consultada sobre el fin de las estructuras o estereotipos, Fiore argumentó que “cuando las estructuras quedan obsoletas molestan más de lo que solucionan. Hoy día los cambios son tan rápidos que a veces esas estructuras no llegan al mismo tiempo que las necesidades que se generan en la sociedad”, advirtió.
También dijo que “el camino del antagonismo o la confrontación nos lleva a la destrucción, entonces tenemos la posibilidad de transitar este otro camino que nos propone trabajar desde lo colaborativo. Hay que animarse a usarlos aunque no sean los tradicionales”, indicó.
Finalizando la entrevista, la abogada y mediadora, Valeria Fiore, hizo una referencia a convivir y vivir en armonía indicando que “hay mucha gente que convive y no en armonía”.
“Convivir se aprende, la paz se construye, es el valor base, porque sin la paz no hay posibilidad de pensar en justicia, educación o en salud”, resaltó. Y agregó que “los conflictos mal manejados enferman a la gente, por eso es importante valorar la paz, generarla en uno para poder generarla en el entorno”, finalizó.
Para contactar a la Asociación Misionera de Mediación podes acercarte a Córdoba Nº 1455, mandar un correo electrónico a [email protected] o al facebook: Asociación Misionera de Mediación.