Las familias de la Chacra 233 pudieron concretar la extensión de 300 metros de la red de agua potable, accediendo así al agua potable de manera directa, reclamo que representaba una vieja lucha para los vecinos y que recién se concretó con la intervención del defensor del Pueblo de Posadas, Alberto Penayo.
“Habíamos hecho todos los trámites ante los organismos correspondientes, pero nunca tuvimos una respuesta, hasta que acudimos con el defensor Penayo a quien encontramos un día recorriendo el barrio, le planteamos nuestra situación y a partir de las gestiones de la Defensoría pudimos lograr una solución”, indicaron los vecinos.
En ese sentido, Penayo recalcó que “la Defensoría es una herramienta para que todas las familias, los vecinos, que sientan que tienen un derecho vulnerado puedan acudir y plantear su problemática, y a partir de allí iniciar todas las gestiones pertinentes para poder brindarles una respuesta favorable. Esto es una construcción que se hace a partir del diálogo y la participación”.