Se trata de, Estela Gentiluomo de Lagier y Nilda Brañas de Poujade, Lara Schwiters y Osvaldo Mazal que adhirieron a la propuesta de la secretaría de Cultura y Turismo en el espacio Multicultural.
Allí miembros del jurado para la terna “Letras” (Raúl Novau y Javier Figueroa) interpelaron a los exponentes generando una dinámica con los invitados y transeúntes recibidos por el Prof. Sebastián Rolon y Andrea Merahed de la secretaría de Cultura y Turismo capitalina.
«Clotilde y Raimundo; la noble tarea de educar» –en este marco-fue presentada como una historia de amor por la dupla Gentiluomo – Brañas y se mostraron satisfechas de un trabajo que afianza una amistad de décadas. Coincidieron en la admiración de una figura clave en la Historia de la educación pública. Un relato marginado quizás por la época en que las mujeres estaban más vinculadas a las tareas domésticas y era de mal gusto las aspiraciones sociales exclusivas de los caballeros. Otra reflexión radica en los celos hacia un matrimonio que con una mirada estratégica y solidaria pudieron financiar establecimientos educativos pioneros en la formación docente y la alfabetización.
En esta misma línea de enriquecer la Historia con una mirada misionerista, Lara Schwiters a través de canciones, recuperó anécdotas de las bandas y cantantes de Rock. Siempre estuvo muy vinculada al ambiente y compartió sueños de “tocar” y de exponerse al público con “acústica de acá”. Un desafío complejo, principalmente en los 90’ cuando había pocas emisoras de radio y como hasta ahora, con la predisposición empresarial a la producción porteña. Un apartado elocuente es la grabación del material local; que hoy es más accesible pero para quienes se embarcaban en este arte sigue siendo costoso. En este orden de cosas la autora destacó la labor del reconocido Gary Anadón –pionero-que grabó su música en Asunción en la época del casete. «Rock en Misiones: canciones con Historia» se llama el libro.
Completó el plenario Osvaldo Mazal, que ubicó al naturalista Darwin en escenarios impensados con historias que parecen fantásticas si el lector está aferrado a la persona científica. «Darwin Poeta; una novela inclasificable» se desarrolla con la imaginación en máximos niveles aunque con “disparadores” muy personales y reales como los padres del autor o elementos documentales de las ciencias.