La semana pasada, la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación fijó el precio de la yerba mate en $11,55 para la tonelada de hoja verde de yerba mate y en $43,89 para la canchada (la hoja sometida a una primera molienda gruesa); valores por debajo de los $13,50 solicitados por el Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym).
Por esa misma razón, cerca de 400 productores yerbateros se reunieron ayer en San Pedro donde decidieron que de los $11,55 pesos estipulados por la Nación, $7 pesos irán para el productor, $1,75 para el tarefero y el resto para prestadores.
En tanto que, Julio Petterson presidente de la Asociación Civil de Productores Yerbateros del Norte, alertó que “Al secadero que no cumpla con los precios vamos a bloquear el ingreso de la materia prima”.
Además, se mostró disconforme con el precio establecido pero consideró que “reabrir la negociación demandaría mucho tiempo y la familia yerbatera necesita subsistir”.
En definitiva, no hubo acuerdo con relación la posibilidad de llevar adelante una protesta para exigir que se cumpla con la exigencia de los productores de llevar el precio de la hoja verde a 13,50 pesos, pero sí hubo consenso con relación a recomendar a los productores que posterguen lo máximo posible la cosecha, para provocar un faltante de materia prima que eleve los precios.
Vale recordar que la yerba mate es el único sector primario cuyos precios están regulados por el Gobierno desde la crisis yerbatera de 2.002. La ley 25.564 define que en primera instancia los valores obligatorios de la yerba mate deben ser acordados dos veces al año (en marzo y en septiembre) entre los distintos sectores que forman parte deI INYM y que si no fuera posible un acuerdo se recurrirá a un laudo por parte de las autoridades de Agroindustria.